MOSCU.- La fuerza aérea ucraniana reportó, el martes 13 de agosto, que Rusia lanzó 38 drones de drones de ataque y dos misiles balísticos Iskander-M contra Ucrania durante la noche, justo una semana después de que comenzara la incursión ucraniana en Kursk, que se considera el avance más contundente de Ucrania en estos dos años y cinco meses de invasión rusa.
El martes, por la mañana, toda Ucrania estuvo brevemente bajo alerta de ataque aéreo y treinta drones fueron destruidos en ocho regiones ucranianas, de acuerdo con el reporte de la fuerza aérea en la aplicación de mensajería Telegram. Sin embargo, no queda claro qué pasó con las armas que no fueron eliminadas.
El ataque en la ciudad de Sumy hirió a una persona y dañó una línea eléctrica y un gasoducto, dejando a algunos residentes de la ciudad sin suministro de electricidad y gas. Además, afectó un edificio de hospital y varios automóviles, dijeron las autoridades locales.
El Estado Mayor ucraniano declaró en un comunicado que debido a la intensificación de los combates y la activación de grupos de sabotaje y reconocimiento rusos en esa región, Ucrania ha decidido restringir la circulación de civiles en una zona de 20 kilómetros a lo largo de la frontera con Rusia.
El gobernador regional de Chernihiv, Vyacheslav Chaus, afirmó que el ataque tuvo como objetivo la infraestructura civil y no se reportaron víctimas fatales en la región norte.
Más tarde el operador de la red nacional Ukrenergo dijo a través de Telegram que drones rusos atacaron infraestructura energética en esa región y que ya se restableció la energía para los consumidores industriales y domésticos en algunas áreas.
Mientras que los funcionarios regionales de la región central de Vinnytsia dijeron que el ataque dañó un edificio residencial sin dejar víctimas.
Y también afectó un edificio en la región de Mykolaiv, según el gobernador regional Vitaliy Kim.
Ucrania sigue con los ataques en Kursk
Un día después de que el presidente Vladimir Putin arremetiera contra Occidente por apoyar la incursión sorpresa de Kiev en territorio ruso y que prometiera dar una respuesta digna a esta incursión en Kursk, Ucrania lanzó este martes nuevos ataques con drones en esa región fronteriza rusa.
El ministerio de Defensa de Rusia afirma que sus fuerzas destruyeron doce drones en Kursk, zona de la que el jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, el general OleksandrSyrsky, afirmó, el lunes 12 de agosto, haber capturado 1.000 kilómetros cuadrados (386 millas cuadradas).
Otra cosa dice el gobernador interino de Kursk, Alexei Smirnov, quien aseguró que Ucrania controlaba 28 asentamientos en la región y que la incursión tuvo una profundidad de unos 12 kilómetros y un ancho de 40 kilómetros.
Ninguna de las cifras hasta el momento ha podido ser corroborada por un tercero.
El presidente Putin, en sus declaraciones públicas más detalladas sobre los ataques hasta la fecha, dijo que con esta acción Kiev busca mejorar su posición negociadora y que «con la ayuda de sus amos occidentales» está tratando de frenar el avance de las fuerzas rusas en lo que el Kremlin llama una «operación militar especial» en Ucrania.
Zelenski, por su parte, en un video, afirmó que esta es la manera de “forzar” a Rusia a la paz.
Sin embargo, Putin cuestionó las negociaciones con Ucrania al acusar a ese país de disparar indiscriminadamente contra civiles rusos e instalaciones nucleares.